Fuerza revolucionaria
La experiencia de lucha nos ha entregado la fuerza revolucionaria, se ha puesto una bala en la conciencia popular donde se ha entendido que los cambios no pasan por las técnicas en combate, el armamento, ni por la capacidad de los combatientes para enfrentar a un militar, político o quien sea comprado por el ideal fascista, el mejor fusil es el militante con conciencia de clases, aquellos que se identifican con las realidades de su pueblo, ellos son padres y hermanos, hijos todos de la madre revolución.
Como diría “ALLENDE” La historia es nuestra y la hacen los pueblos.
Es el ¡Hombre! quien hace la historia “es el ser” que se considera “humano” y alimentándose con la visión social construye una patria sin fronteras, es así como se constituyen motores del respeto por el actuar colectivo y la furia heredada por el amor del cambio y la construcción, nunca nuestras mentes deben dejar de soñar, el pensamiento ortodoxo de creer que todo lo sabemos, es la clara muestra de que nada entendemos y que la praxis diaria debe ser crear, recordando siempre que la destrucción es el arte de la construcción. Por que son las masas las que hacen la historia, es el poder popular el motor y el cambio, en síntesis los revolucionarios son extensiones de su saber y expresión de la emancipación sustentada por la búsqueda de la dignidad, “del hombre por el hombre”.
Vale recordar a Lenin que decía: “Sólo los miopes pueden considerar irrelevantes y superfluas las luchas entre fracciones y la diferenciación entre matices en las opiniones. Más es de entender que cada hermano combatiente tiene una revolución personal, que serán las revoluciones y la pluralidad de las convicciones e ideales, la esencia del trabajo colectivo donde todos se sientan parte será la energía para alcanzar el anhelado poder popular, viajemos en este ancho camino, es el momento hermanos ya la crisis orgánica del capital es evidente, mas el clamor del pueblo que se ve enfrentado diariamente al determinismo histórico de gobiernos asesinos y criminales, es debido a esto que todo revolucionario debe eliminar ese manto dogmático y el pensamiento paternalista, que muchas veces deriva en nuevos burgueses y resentidos sociales con ansias del poder personal.
Compañeros
Hoy vemos reflejado las rupturas y quiebres, la lucha contra los pactos burgueses, entre tantas cosas el estado de bienestar en que vive nuestra sociedad, todo es cuestionable y al parecer las fuerzas capitalistas al caer se unifican con aquellos que en tiempos peores fueron nuestros “amigos” coherencia con el decir y el actuar…“praxis colectivo” es poder popular, “praxis en el bolsillo” es poder de acumular, Unificarse es necesario conciencia revolucionaria hasta la victoria y siempre.
“Contra el imperio soberanía nacional, contra la oligarquía soberanía popular”. MISIONERO ALI
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